El regreso de uno de los iconos más influyentes del género de acción en tercera persona cada vez está más cerca. Remedy Entertainment ha publicado su más reciente informe financiero semestral y, entre los datos para inversores, ha confirmado que el desarrollo de Max Payne 1 & 2 Remake progresa de forma notable y con una coordinación muy estrecha junto a Rockstar Games, propietaria de la marca y editora de los títulos originales.
El estudio finlandés explica que este ambicioso proyecto ha pasado ya por sus primeras fases creativas y se encuentra actualmente en plena fase de producción, con un equipo dedicado que trabaja para asegurar que tanto el tono narrativo como la calidad técnica estén a la altura de las expectativas. Remedy subraya que la colaboración con Rockstar no se limita a un mero acuerdo de licencia, sino que incluye una supervisión directa y continua para garantizar que la visión creativa de ambas compañías esté perfectamente alineada.
Un remake de dos clásicos en un solo lanzamiento
Anunciado en 2022, este proyecto unificará Max Payne (2001) y Max Payne 2: The Fall of Max Payne (2003) en un solo título, reconstruyendo desde cero los escenarios, personajes, animaciones y mecánicas, pero preservando la esencia de la saga. Remedy ha confirmado que utilizará su potente motor Northlight, el mismo que impulsa Control y Alan Wake 2, lo que garantiza un salto técnico considerable.
El presupuesto de este remake será similar al de un título AAA de gran envergadura, comparable al de Alan Wake 2, lo que deja claro que no se trata de una simple remasterización, sino de un proyecto de gran escala. Esto permitirá que el legendario sistema de “tiempo bala”, que revolucionó los shooters en tercera persona a principios de los 2000, regrese con físicas avanzadas, animaciones más fluidas y una puesta en escena cinematográfica.
Manteniendo la esencia noir
Los dos primeros Max Payne fueron célebres por su tono oscuro, su atmósfera opresiva y su narrativa profundamente influenciada por el cine negro y el thriller policial. Remedy asegura que el remake preservará esa identidad, modernizando la dirección artística y el apartado sonoro, pero manteniendo el característico uso de la voz en off de Max y sus monólogos internos cargados de metáforas.
Además, el guion original, escrito por Sam Lake, actual director creativo de Remedy, servirá de base para esta nueva versión, aunque se espera que haya pequeños ajustes narrativos y de ritmo para adaptarlo a las expectativas actuales.
Plataformas y expectativas
El remake llegará a PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC, aunque Remedy no ha fijado una ventana de lanzamiento concreta. Con el desarrollo en pleno proceso de producción, todo apunta a que no lo veremos antes de 2026, aunque los fans confían en recibir un primer tráiler con gameplay en los próximos meses.
Con esta noticia, Remedy y Rockstar buscan no solo revitalizar una franquicia mítica, sino también reintroducir a Max Payne a toda una nueva generación de jugadores que no vivieron el impacto que tuvo en su momento. Si cumplen lo prometido, podríamos estar ante uno de los regresos más potentes de la década.
