Steam sigue demostrando que es, sin discusión, el epicentro del juego en PC. El pasado domingo 12 de octubre, la plataforma de Valve batió un nuevo récord al registrar 41.666.455 jugadores conectados al mismo tiempo, una cifra que no solo marca un nuevo máximo histórico, sino que consolida el crecimiento imparable del servicio en los últimos años.
El logro llega apenas unos días después de haber superado el umbral de los 41 millones, impulsado principalmente por el lanzamiento de Battlefield 6, que debutó el 10 de octubre con un impacto inmediato: 747.440 jugadores simultáneos en sus primeras 24 horas, colocándose como el decimocuarto pico más alto en la historia de Steam. El esperado shooter multijugador de Electronic Arts no solo atrajo a miles de veteranos de la saga, sino que también se convirtió en uno de los juegos más vistos en Twitch, con más de 1,2 millones de espectadores simultáneos durante su estreno.
Más allá de este lanzamiento puntual, los datos confirman una tendencia de crecimiento sostenido en la última década. En 2020, Steam alcanzaba los 19 millones de usuarios concurrentes; en 2022 llegó a los 28 millones; en 2023, a los 30 millones; y en 2024 rozó los 39,2 millones. Ahora, en 2025, la plataforma ha más que duplicado su base de jugadores simultáneos en apenas cinco años, un ritmo de crecimiento excepcional para un servicio que ya era líder indiscutible en el mercado.
Entre los títulos que sostienen estas cifras están los clásicos incombustibles de la plataforma: Counter-Strike 2, Dota 2, PUBG: Battlegrounds, Apex Legends o Rust, juegos que siguen atrayendo millones de usuarios diarios y que han creado comunidades enormes y activas dentro del ecosistema de Valve.
El éxito de Steam, sin embargo, va más allá de los números o del catálogo. Parte de su fortaleza radica en un modelo de plataforma centrado en la experiencia del jugador, sin publicidad invasiva, con soporte nativo para mods a través de Steam Workshop, guardado en la nube, chat integrado, mercado comunitario, retransmisiones en directo y un sinfín de herramientas que fomentan la interacción y la personalización. Todo ello ha convertido a Steam no solo en una tienda digital, sino en un ecosistema social y técnico sólido donde los jugadores encuentran comodidad, soporte y continuidad a lo largo de los años.
Mientras otros competidores intentan consolidarse como Epic Games Store, GOG o incluso la propia Microsoft Store, Steam sigue marcando la pauta. Su capacidad de adaptación, el apoyo a los desarrolladores indie y una política de descuentos que cada año genera eventos masivos como las rebajas de verano o de invierno, refuerzan una posición difícil de igualar.
A la vista de los datos, 2025 podría cerrar como el año más exitoso en la historia de Steam, con una base de usuarios que no deja de crecer y una comunidad más activa que nunca. El trono del juego en PC, al menos por ahora, sigue teniendo un dueño claro: Valve.