Dying Light: The Beast apunta a convertirse en una experiencia de zombis, rol y acción mucho más centrada e intensa que entregas anteriores. En una entrevista con Vandal, Tymon Smektala, director de la saga Dying Light, ha revelado que este nuevo título ha sido "diseñado para ser ajustado, centrado e impactante", respondiendo a la creciente demanda de los jugadores por juegos más concisos y sin contenido de relleno. Además, Smektala deja la puerta abierta a una futura tercera entrega principal de la serie. El lanzamiento está previsto para este verano.

"Indudablemente", afirma Tymon Smektala por correo electrónico al ser preguntado si la demanda de videojuegos “más cortos, más concisos y menos abultados” ha influido en el desarrollo de lo nuevo de Techland. “Dying Light: The Beast está diseñado para ser ajustado, centrado e impactante”, subraya el director de la saga, dejando claro que la filosofía del proyecto apunta a ofrecer una experiencia más depurada y enfocada.

"Te esperan más de 20 horas de juego en la narrativa principal, pero sin nada de relleno", asegura Tymon. Una promesa que marca un contraste significativo con Dying Light 2, cuya duración se extendía a más de 24 horas solo para la campaña principal, 48 horas sumando contenido secundario, y cerca de 100 horas para quienes buscaban completarlo al 100 %, según datos de HowLongToBeat.

El enfoque de Dying Light: The Beast es claro: ofrecer una experiencia más compacta, pero cargada de intensidad. Tymon Smektala, explica que “cada misión, cada entorno y cada combate está pensado para aportar a la historia y a tu experiencia”. Aunque incluirá misiones secundarias y actividades opcionales, su diseño se aleja del enfoque expansivo de la segunda entrega: “Si Dying Light 2: Stay Human era la gran epopeya de mundo abierto, The Beast es el thriller intenso que te atrapa y no te suelta”.

Esa filosofía se refleja también en el mundo abierto del juego, que promete ser “denso y diverso”, con zonas que introducirán desafíos únicos y mecánicas específicas. Smektala describe cómo la tensión se vivirá al máximo: “En un momento estás escabulléndote por el bosque, tratando de averiguar si las sombras en el haz de tu linterna son de árboles o de zombis; al siguiente, estás cruzando un campo de cultivo abierto, esperando que nada salte del trigo”.

Aunque Dying Light: The Beast apuesta por una experiencia más concisa, eso no implica renunciar a la exploración o a la profundidad. El directivo lo deja claro: “El mundo está lleno de caminos ocultos, secretos y combates creados a mano que recompensan la exploración”. Así, aunque se aleja del modelo de mundo abierto expansivo, el juego no pierde el espíritu aventurero que caracteriza a la saga.

Tymon remata con una reflexión que resume la filosofía del título: “Piensa en ello como la diferencia entre vagar sin rumbo y explorar con un propósito; eso es lo que pretendíamos”. Un enfoque que promete mantener la tensión y el ritmo narrativo sin dejar de lado la libertad del jugador.

Dying Light: The Beast llegará en verano de 2025 a PS5, PS4,Xbox Series X|S, Xbox One y PC con la distribución a cargo de Level Infinite (Tencent). Como gesto hacia la comunidad, quienes adquirieron la Ultimate Edition de Dying Light 2 recibirán el nuevo título de forma gratuita, en compensación por la segunda expansión prometida que nunca llegó a publicarse. Una forma de agradecer la fidelidad de los jugadores y mantener el compromiso con quienes apostaron por el contenido completo de la anterior entrega.

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