Grand Theft Auto VI continúa en desarrollo, aunque, como muchos ya saben, su lanzamiento ha sido pospuesto hasta el 26 de mayo de 2026. La noticia ha caído como un jarro de agua fría entre los fans, que esperaban recorrer las calles del nuevo sandbox de Rockstar este mismo otoño

El retraso ya ha tenido impacto en Take-Two, cuya cotización en bolsa se resintió tras el anuncio oficial. Pero eso no es todo: según advertía en marzo un analista de Newzoo, esta decisión podría desencadenar un efecto dominó con repercusiones en toda la industria del videojuego, anticipando ya entonces las posibles consecuencias de un aplazamiento de GTA 6.

En marzo, Ben Foster, analista de la reconocida firma Newzoo ya anticipaba lo que ahora es una realidad: el retraso de GTA VI. Sus declaraciones no fueron precisamente alentadoras para la industria, advirtiendo que el cambio de fecha podría tener un impacto devastador en varios estudios. Según Foster, hay compañías que han estado ajustando sus calendarios y estrategias en torno al lanzamiento del nuevo título de Rockstar, y algunas podrían tambalearse seriamente ante este nuevo escenario. Estas fueron sus palabras:

"Si eres una de esas empresas de videojuegos que está aguantando su respiración a la espera de que salga GTA 6 y luego se retrasa tres, cuatro, cinco o seis meses, ¿qué haces?". Refiriéndose a esas compañías que han estado ajustando sus planes de desarrollo y lanzamiento, a la espera de que Rockstar fijase una fecha definitiva para GTA VI. Y no es para menos: el analista advierte que competir directamente con el sandbox más esperado de la década sería, para muchos, un suicidio comercial, ya que el juego de Rockstar está destinado a eclipsar prácticamente cualquier otro título que se cruce en su camino.

"Tienen que ser capaces de lanzarlo (su juego) aprovechando el gran hueco que quedaría abierto o tienes que ajustar tu calendario de ejecución seis meses más... Estoy seguro de que algunas compañías se hundirían como resultado de este ajuste, ¿verdad?" Termina Foster.

En otras palabras, Foster cree que el retraso de GTA VI obliga a muchas compañías a moverse con rapidez y precisión. Aquellos estudios que tengan sus proyectos listos podrían aprovechar el vacío que deja Rockstar este otoño y lanzar sus juegos en un momento más despejado del calendario. Sin embargo, quienes no estén preparados se verán forzados a reestructurar sus planes una vez más, lo que podría suponer un duro golpe económico, especialmente para los equipos que dependen de ingresos inmediatos para cubrir los costes de desarrollo. En algunos casos, advierte Foster, esto podría incluso desembocar en crisis internas dentro de ciertos estudios.

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